Enogastronomía
En la ciudad de Viña del Mar existen tantas ofertas gastronómicas como balnearios. Sin duda, los platos preferidos de los turistas y comensales frecuentes son los que incluyen peces y mariscos. La geografía de esta ciudad permite que las costas brinden a sus habitantes una gran variedad de productos marinos, especiales para la preparación de platos típicos de esta zona. Sin embargo, el carácter cosmopolita de Viña del Mar y su gran apertura al resto del mundo, hace que diferentes restaurantes deleiten con sus menús no sólo especializados en comida costera, sino también con platos internacionales.
Los paseos por el borde costero, visitas a museos y los diferentes balnearios de Viña del Mar definitivamente no tienen fin. Esta ciudad está hecha para ser descubierta por los turistas todos los días del año y,en especial, en la temporada estival. Sus calles y edificios están adosados de variadas corrientes arquitectónicas, cada una de ellas con una interesante historia. Al mismo nivel se encuentran los centros gastronómicos importantes de la zona. Muchos de ellos llevan décadas en funcionamiento, formando así negocios familiares repletos de anécdotas y tradición.
Gracias a la favorable geografía de Viña del Mar, es posible disfrutar de platos característicos de la costa chilena. La costa se encarga de proveer a pesquerías y restaurantes de excelente fauna marina totalmente fresca, la cual se sirve, sólo minutos después, en diferentes comedores. La comida de esta ciudad se reconoce por ofrecer una atractiva preparación de los productos naturales de su zona, haciendo con esto un aporte al mundo gastronómico y turístico.
Entre los platos más pedidos se encuentra el caldillo de congrio, el ceviche, el mariscal, el pastel de jaiba, la paila marina, la parrillada de mariscos, empanadas de camarón y muchas otras preparaciones que engloban la totalidad de los productos que la costa viñamarina puede regalar. En Concón estos platos marinos son la especialidad de la casa, mientras que en los alrededores del sector de Las Salinas, es posible deleitarse con la comida criolla, entre las cuales destacan las humitas, la cazuela, la chorrillana, el pastel de choclo y las empanadas de pino.
En Reñaca y sectores aledaños se encuentra una gran gama de centros gastronómicos preocupados de ofrecer, además de comida criolla y marina, platos internacionales. Lo más pedidos son las pastas, carnes y platos típicos de otros países como los callos a la madrileña.
Una de las mayores ventajas de comer en Viña del Mar y en todo el país, es acompañar estos platos con bebidas de categoría internacional: los vinos chilenos. En la ciudad jardín se producen y comercializan al extranjero vinos de excelencia. Es posible encontrar botellas nacionales en todos los locales gastronómicos, desde los más populares a los más exclusivos, a diferentes precios y gustos. Nada mejor que disfrutar una comida con el vino perfecto, en la gran variedad que ofrecen las cepas de Chile. Un cabernet sauvignon es estupendo para acompañar los platos de carnes, la recuperada cepa de carménèr es excelente para disfrutar de un cocktail y ricos productos para picar informalmente, un sauvignonblanc puede ser una muy buena variedad para acompañar un buen plato de pescados y/o mariscos.
