Turismo

Parte de lo que alguna vez fue la “Hacienda La Viña de la Mar”, la laguna Sausalito se forjó por la familia Vergara con la intención de entregar el agua suficiente a los viñedos de la hacienda que parecían morir debido a una fuerte sequía que amenazaba la zona. Así, lo que empezó como un embalse hoy en día es un verdadero escape hacia la naturaleza casi en el medio de la ciudad.

Décadas atrás, la familia Vergara poseía en su hacienda un viñedo que con el tiempo se convirtió en uno de sus negocios más destacados. Sin embargo, un verano acompañado de sequía eliminó cualquier fuente de regadío cercana al viñedo, amenazando así la inevitable muerte de toda la viña. Fue en estas circunstancias en las que la laguna Sausalito se erigió; su misión era proveer a la viña con el agua suficiente para salvar las cosechas de ese terrible verano y de los que vendrían.

Llamada antiguamente como el “Tranque”, en 1962 cambió su nombre a causa de la hermandad hecha entre Viña del Mar y la localidad de Sausalito en California, Estados Unidos. El alcalde de Sausalito de ese entonces viajó a Viña del Mar a plantar un hermoso árbol en el “Tranque”, mientras que en California se instaló una gran placa como recordatorio de Viña del Mar. Así, en honor a esta alianza, este gran complejo se nombró como Sausalito.

Hoy la laguna no tiene que proveer de agua a ningún viñedo, sino que permanece como actividad turística. Ubicada en el centro de la ciudad, entrega una vista inolvidable llena de áreas verdes y aves diversas. Rodeado de árboles, este sitio entrega una intimidad que es muy difícil de experimentar en otras ciudades.

En cuanto al futuro de este gran terreno turístico, ya se aprobó el proyecto millonario de remodelación del estadio de fútbol, conocido por albergar al equipo viñamarino: Everton. Al finalizar esta remodelación, este estadio, que alguna vez sirvió de escenario para el mundial de fútbol de 1962, se coronará como uno de los más equipados y atractivos de Chile. Por otro lado, el futuro “Parque Deportivo” entregará a sus turistas un completo gimnasio, además de dos canchas de fútbol amateur.

Perfecto para escapar de la rutina o del trabajo, este sitio ofrece tranquilidad y abundancia de naturaleza en medio de la misma ciudad. En sus cercanías se encuentran el Granadilla Country Club (Club de Golf), el Vivero Municipal de plantas y árboles, las pistas para la práctica del bicicrós, el estadio Polideportivo, sedes de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso junto con la Universidad Adolfo Ibáñez y el Colegio de los Sagrados Corazones de Viña del Mar.

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